El fútbol hizo justicia

Íberos C.F. 1 - 2 Tojú C.F.

 Alineación (1- 3 - 2 - 3 - 2): Jorge; Leonardo, (min. 65 Cambre), Gali, Ash; Oliva (min. 75, Toledo), Willy; Héctor, Toledo (min.50, Jordi), Mariano (min. 60, Charly); Valiente (min. 45, Ory) y José.

   Goles: 1 - 0, m. 22, Valiente; 1 - 1 min. 61, Íberos; 1 - 2, m.78, Ory.  

 Amonestaciones: Tarjeta amarilla a Gali, Leonardo y Oliva.

    Incidencias: Tangana al final del encuentro.

 

El Tojú Club de Fútbol se llevó a casa una merecida victoria cosechada en un atípico sábado. A pesar de no ser corriente el no jugar los domingos, dicha circunstancia no afectó a los de Ángel Garrido, quienes ante el que muchos consideran el equipo más físico de la Liga demostró no tener nada que envidiarles con una presión intensa en todo el campo y con un desgaste tremendo en todas sus líneas.

El técnico rojillo varió el sistema táctico para introducir más pólvora en ataque, dándole a José un compañero en el que apoyarse, Valiente. Éste último quiso agradecer la confianza en el depositada y a los 20 minutos de partido puso a los suyos por delante en el marcador de cabeza en una falta botada por Ash y en la que se demostró el trabajo de este tipo de jugadas ensayadas por el míster.

El partido hasta entonces, y como continuaría siendo hasta el final de la primera parte, fue un encuentro trabajado, rocoso, con mucho centrocampismo y presión que impedía a cualquiera de los dos equipos dominar el juego y mantener la posesión.

A pesar de ello, el Tojú se mostraba más fuerte que el Íberos en todas las líneas, y las internadas de José y Valiente, un disparo cercano a la escuadra de Toledo, o un gol anulado a Willy por fuera de juego hacían prueba de ello.

Por su parte, el conjunto morado intentaba sacudirse de la presión a través de pases en largo a su rápido delantero, quien ante el marcaje de Gali sólo pudo llevarse a su favor un buen disparo a la escuadra en el que Jorge demostró su condición de hábil y rápido portero.

En los vestuarios Ángel pidió más calma en el juego, más apertura a las bandas y mantener el balón para jugar en su campo. Dicho y hecho: Héctor era un puñal por su banda y Toledo buscaba a José quien era objeto de continuas faltas que, a diferencia de lo que ocurría en el conjunto rojillo, no eran sancionadas con tarjeta amarilla a pesar de su enjundia y/o reiteración.

En esas estaba el partido cuando el árbitro vió un penalty que no fue pero que el delantero rival buscó a la perfección, chocándose aposta con un recién ingresado en el campo Cambre y que cuajó un gran partido una vez más. El empate subía al marcador de la forma más injusta posible.

Los diez minutos siguiente fueron muy tensos entre ambos equipos, entre las airadas protestas del Tojú y el Íberos. Ángel quiso buscar la victoria, y sacó a Oliva, pasando a Charly al centro para que Toledo libre de marca se asociara con los del mediocampo y buscara a Ory y José en ataque. La jugada no pudo salirle mejor: pase de Willy para Ory quien resolvió picando por encima del portero el mano a mano entre ambos. Dos a uno en el marcador.

El encuentro languideció hasta el pitido final sin que el conjunto morado tuviera ninguna ocasión clara para empatar el partido y con un lamentable incidente por parte de un jugador rival que fue expulsado entre insultos, amenazas varias y escupitajos de los que luego se retractó pidiendo perdón públicamente a través del organizador de la Liga.

A fin de cuentas y en lo deportivo, que es lo que le importa y debe importar al Tojú, se llevó una importantísima victoria para su cuenta, demostrando que la llegada de Ángel Garrido puede sacar en lo físico y en lo táctico lo mejor de unos jugadores que creen en su juego, que confían en él y que, como respuesta, lo dan todo en el campo. Íberos y Ausbanc pueden dar fe.