Cuestión de concentración
UDM 2 - 2 Tojú C.F.
Alineación (1- 4 - 4 - 2): Jorge; A. Gámez, Gali, Bobby, Martínez; Valiente (Salvaje, m.55), Oliva, Tafi Haz. (Willy, m.60), Mariano; Mamanú (Diego, m.70) y José (Ory, m. 65)
Goles: 0- 1, m. 54, Mariano; 0 - 2, m. 62, Salvaje; 1 - 2, m. 73, UDM ; 2 - 2, m.82, UDM
Amonestaciones: Ninguna
Incidencias: Ninguna.
El Tojú Club de Fútbol pagó caros sus errores y se llevó sólo un punto de un partido donde parecía tener los tres asegurados. La confianza, la relajación y una vez más, los despistes a la hora de contribuir en tareas defensivas cuestan dos goles que frenan la racha de victorias que venía cosechando el conjunto tricolor.
Y es que es un empate que sabe a derrota, porque el Tojú fue dueño y señor del partido en todo momento, con un disparo a la mismísima escuadra de Tafi Haz., dos palos de Valiente y Gámez, y un sinfín de paradas de un portero rival que tuvo una soberbia actuación en la primera parte (paradón a un disparo a bocajarro de José, paradón a una falta a la escuadra de Valiente, parada de un disparo ajustado desde la frontal a Oliva) y en la segunda (mano a mano a su favor de Mariano, disparo de un Oliva escorado, mano a mano a su favor de Valiente...)
Sin embargo, la suerte de UDM se terminó a comienzos de la segunda parte, donde una nueva conexión entre Oliva y Mariano dejaba a éste sólo para vencer en un mano a mano al portero rival que, por si acaso, Mamanú se aseguraba de remachar. Poco más tarde, Salvaje marcaba un gol a lo lateral brasileño, superando en su centro-chut al guardameta rival. 2 a 0 y el partido en el bolsillo. ¿O no?
Quien perdona, lo paga
Poco más tarde, un balón mal defendido en un córner entraba en la portería tras tocar en varios jugadores. La remontada había sido regalada por los de Fran Urbina... y pudo ser peor: volcado el equipo en ataque, sólo Jorge con una soberbia mano supo evitar la derrota. Empate que sabe a derrota y que deja muy mal sabor a un equipo que tiene que aprender a jugar con el resultado y a mantener la intensidad los 90 minutos, justo lo mismos que dura un partido. A fin de cuentas es sólo eso: cuestión de concentración.
El carrusel de cambios que introdujo entonces el míster provocó una sensación de desorientación y de falta de tensión de un equipo que, más por demérito propio que por méritos del rival, se iba encerrando atrás él solo y dando el juego del balón al equipo rival. Una confusión en una falta sacada pronto por la UDM dejaba sólo al rival para batir a Jorge.
1 comentario
valiente/gonchi -
abrazo y buena semana a todos